Inglaterra.- Florence Widdicombe, una niña pequeña de 6 años de edad, descubrió un mensaje oculto en una de las tarjetas de navidad que le iba a regalar a sus compañeros de clases, en la que prisioneros denunciaron que estaban siendo obligados a trabajar contra su voluntad.
De acuerdo con el reporte de la BBC, los hechos ocurrieron este domingo 22 de diciembre en la ciudad de Londres, cuando la pequeña Florence escribía mensajes navideños en cartas que había comprado para sus amigos de la escuela.
Pues cuando Florence abrió la sexta u octava carta, se dio cuenta de que esta ya contenía un mensaje y se la llevó a su papá, Ben Widdicombe, quien descubrió el peculiar texto.
Somos prisioneros extranjeros en la prisión de Shanghái Qingpu, China. Somos obligados a trabajar en contra de nuestra voluntad. Por favor, ayúdenos y avisen a una organización de derechos humanos”, decía la tarjeta.
Además, pedían a quien encontrara la nota que por favor avisara al periodista inglés Peter Humphrey, quien también fue encarcelado en China hace cuatro años.
El padre de la niña contactó al periodista y dio a conocer la noticia, ante lo que la empresa productora de las tarjetas, llamada Tesco, confirmó que suspendieron la produccIón en su fábrica de China, además de que reiteraron que nunca permitirían trabajo penitenciario en sus productos.
Por su parte, el periodista Peter Humphrey reveló que que él mismo estuvo en la prisión de Shangai donde están los reos que habrían mandado el mensaje, y aunque recordó que el trabajo dentro de la cárcel era opcional, ahora se habría vuelto obligatorio, lo que llevó a sus excompañeros a mandar ese mensaje escondido.
Saben muy bien que si son atrapados, serán castigados, por ejemplo, perdiendo algunos puntos de mérito o teniendo algún tipo de privación de parte de su asignación de alimentos. Podrían ser castigados enviándolos a confinamiento solitario durante un mes o algo así” explicó.