Hoy es víspera de navidad, día de paz, día de amor, de sorpresas, de abrazos, celebración, cenas, llamadas, añoranza, festejos, sonrisas, día en que familias de sangre o por decisión se reúnen, día en el que se extraña a las personas que han dejado huella en nuestras vidas y ya no están, para los que son padres y viven la experiencia de la Navidad con regalos sorpresa para sus hijos, este día es incomparable, las caritas de asombro, de esperanza y felicidad en los pequeños son momentos que valen la pena recordar toda la vida.
En estos días la fragilidad y la fortaleza se unen en un abrazo, es un buen momento para dejar ir lo que te hace daño, con la bandera del perdón y buenos deseos, ¿y por qué no?, empezar por ti, recuperar tu esencia, aliviar tu dolor, este día como todos los demás no es de buenos ni malos, si no de oportunidad, es solamente de quien quiera aprovecharlo, quien lo use de pretexto para renacer, quien lo sienta y se decida a vivirlo, abraza a ese niño que llevas dentro, y que disfrutaba los días como hoy, y demuéstrale que puedes ser el adulto que el soñaba, hazte responsable de tu vida y acepta tus errores, descubre que estas justo en el lugar que tu decidiste, que nadie más que tú te llevó hasta ahí, si te gusta felicidades, puedes lograr eso y más, si no te gusta, que esperas para cambiar, la fortaleza también se trata de perdón, de llorar.
Y sal a la calle, genera en ti todos los sentimientos que quieras de regreso, si quieres amor, dalo, si quieres agradecimiento, agradece primero, si quieres paz, no hagas la guerra, que no tendrás problemas cuando haces lo que te corresponde hacer, ve por tus sueños, créate nuevos proyectos, aprende de todo, vive, disfruta, respira, siente, muévete, canta, baila, grita, lee, reflexiona, mira al cielo, cierra los ojos, permítete escuchar, agradece la vida de la mejor manera& viviéndola.
Feliz Navidad
