Hoy justamente se cumple un año del inicio de la actual administración federal y es momento de iniciar el recuento de los resultados.
Recordemos que Andrés Manuel López Obrador, inició con un alto índice de popularidad (casi el 80% de aprobación) y a 12 meses, aún y a pesar de que la aceptación de los mexicanos no es la misma, es alta y aceptable (56.8%).
Hace varios meses, comentamos en este mismo espacio, que los detractores de Andrés Manuel López Obrador, debían entender que una popularidad tan alta, no cae de la noche a la mañana, y a sus defensores, también el concientizarlos que, la popularidad de su líder, no va a durar para siempre.
En su momento, comentamos que debíamos dejarle trabajar y unirnos en torno a él, pues sí hacía un buen papel, los que ganamos somos todos; llegados los primeros doce meses de su gobierno, podríamos entonces, expresar una opinión firme, con base a los resultados.
Con respecto a la seguridad pública, hemos hablado de manera constante, en donde los resultados han sido muy distintos a lo prometido; en lo económico ya estamos en recesión. En materia de salud, son muchas las quejas por el desabasto de medicamentos y cierre de programas.
A favor del actual gobierno, el sistema de recaudación de impuestos, ha evolucionado en favor del cobro con menos gasto, las becas de capacitación a jóvenes que no han tenido acceso a la educación y al empleo, se han incrementado y algo que era reclamo de muchos ciudadanos, la cercanía del Presidente con el pueblo, se ha incrementado.
El golpe más duro para los ingresos de las familias mexicanas, aún está por llegar, pues como lo adelantamos hace meses, en el 2020, resentiremos en la economía personal y nacional, la falta de generación de empleo formal y la nula generación de riqueza.
Será a finales del primer trimestre del 2020 (marzo), cuando el desempleo se encuentre en su máximo apogeo y las empresas, ante la espera de la reactivación económica e inversión en infraestructura, pegue de lleno en nuestros ingresos directos.
El INEGI ha informado que en los primeros 11 meses de gobierno, más de dos millones de mexicanos permanecieron desempleados, y en lugar de bajar la cifra, ésta se incrementó en 213 mil personas que perdieron su trabajo; mientras que la informalidad laboral alcanzó al 56.2% de la población económicamente activa.
De igual manera, el trabajo mal pagado y con jornadas superiores a las 8 horas (condiciones críticas de trabajo), subió casi 4%, lo que representa el que las víctimas de malas condiciones de trabajo, pasaran en México, de 8.4 millones a más de 10.5 millones de personas.
Curiosamente quien encabeza la lista de estados con mayor desempleo, es Tabasco con 7.1%, seguido por Querétaro, Sonora y Ciudad de México, mientras que estados como Hidalgo y Aguascalientes, lograron salir con números negros al generar mayor fuente de empleos en el país.
Sin duda alguna, urge una estrategia en la que el ejecutivo se alíe con el legislativo, pues mientras el Presidente de la República habla de austeridad, los diputados se auto recetaron, un 50% más de aguinaldo para éste año& Ellos no pasarán hambre en estas fiestas decembrinas.
El 2020 será de elecciones en Hidalgo y Coahuila, la pregunta es si quienes hoy gobiernan a nivel federal y llegaron con las siglas de un partido, podrán mantener la popularidad y aceptación general, o si sus acciones y fallas en la administración y el auto pago de cantidades fuertes de dinero en el legislativo, traerá alguna factura que pagar.
Por hoy me despido, esperando tus comentarios.
Hasta la próxima.
