Un estudio publicado en el British Medical Journal indicó que la demencia senil en mujeres se puede prevenir siempre y cuando éstas consuman alcohol con moderación, como cerveza y vino tinto.
En el estudio se analizó a mil mujeres de entre 35 y 55 años y se les dio un seguimiento de 23 años.
Se tomaron en cuenta factores de conducta, biológicos y sociales, y durante el tiempo que se monitoreó a estas personas se observó que el consumo de bebidas alcohólicas postergaba los síntomas de dicha enfermedad.
Aquellas que a lo largo del tiempo tuvieron una ingesta de no más de 7 copas por semana, en específico, los antioxidantes del vino y la cebada de la cerveza retrasaron la enfermedad a sus 76 años.