Médicos registraron el primer caso del llamado “síndrome del corazón roto” por haber comido algo muy picante. La víctima fue una mujer que, en una boda, comió una gran cantidad de wasabi, creyendo que era guacamole.
La paciente, de 60 años, nunca había sufrido dolores en el pecho, pero al comer una cucharada de lo que creía que era la salsa de aguacate, notó un fuerte picor en la boca, seguido de un dolor en el pecho que se extendía por los brazos.
A pesar de que la sensación duró horas, la mujer se quedó en la celebración y sólo acudió a urgencias a la mañana siguiente porque se sentía débil. Un cardiograma evidenció una anomalía o daño en el ventrículo izquierdo de su corazón, que se conoce como “el síndrome del corazón roto”.