Los más de 140 niños que realizarán la representación del vía crusis en la Bella Airosa hacen que la celebración de la conocida iglesia de San Francisco de torne inusual.
 

Son famosas las representaciones vivientes que se realizan en los barrios altos de la ciudad; el de la colonia el Arbolito destaca entre los más antiguos; sin embargo, en San Francisco, niños desde los seis y hasta los 12 años piden ser incluidos en la representación de Semana Santa.
 

Formados en una rueda semicircular, cubren su rostro de los rayos de sol que pegan con fuerza cerca de las 12:00 horas del lunes 26 de marzo, ensayan justo en la explanada Aniceto Ortega, repiten una y otra vez sus diálogos, se mueven y caminan hasta las inmediaciones del recinto religioso.
 

Al pie del templo de San Francisco son instruidos por su coordinadora y catequista, la señora Ema Sánchez Madariaga, quien contó para AM Hidalgo que el vía crucis infantil tiene 24 años de antigüedad.
 

Cuatro meses previos a la llamada Semana Mayor, los infantes de entre 6 y 12 años se reúnen para ensayar la crucifixión, “se busca un Jesús chiquito porque una vez nos tocó un grande y como que no cabía en la cruz”, dijo Ema.
 

Para complementar los ensayos, la coordinadora del vía crucis infantil platicó que los niños tienen un retiro espiritual, así como una “cena pascual que se asemeja a lo que Jesús hizo con sus apóstoles en la Última Cena”.
 

La selección de los personajes emblemáticos como Jesús y María, se realiza con aquellos niños que acudieron por seis años a la llamada “Escuela de la Fe”.

Sánchez Madariaga dijo que a diferencia de las representaciones en los barrios altos, éste tiene la peculiaridad de trabajar con infantes.
 

“En los barrios de Pachuca es más comedia que lo que verdaderamente es, porque a veces los grandes ni se confiesan o comulgan, no se preparan espiritualmente y los niños sí”.
 

LA CRUCIFIXIÓN EN LOS BARRIOS ALTOS

El vía crucis del Arbolito, clasificado como el pionero en los Barrios Altos, cumplirá 49 años en su emisión de 2018, contó para AM Hidalgo el organizador Jorge Alfredo Moctezuma Aranda.
 

En entrevista, dijo que dicha tradición la trajeron en 1969 misioneros jesuitas provenientes de la Ciudad de México, entre ellos, Pedro Humberto Arriaga Alarcón, hoy sacerdote en Chiapas, y el párroco Alfonso Corcuera.
 

Señaló que a partir de ese momento se realizó la primera representación, por tal razón, es la más antigua de Pachuca; sin embargo, Moctezuma Aranda narró que fue hasta la década de los setenta cuando se incluyeron actividades como Domingo de Ramos y la Última Cena.
 

“Es un acto de fe, una tradición que se ha arraigado en Pachuca (…) el barrio del Arbolito fue la semilla que tuvo frutos en muchos puntos de la ciudad, entre ellos en el de Las Lajas”, expresó.

Mientras que el vía crucis del barrio de Cubitos fue el segundo que se implementó en la capital hidalguense “por allá de 1971, 1972”.
 

Alfredo Aranda comentó que la preparación comienza desde enero con ensayos constantes de lunes a viernes a partir de las 20:00 horas en la Casa de la Cultura de esta colonia.
 

“Yo tengo cerca de 32 años participando como Caifás y Poncio Pilato para preservar esta tradición”, finalizó.

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