León.- El viernes pasado, unos días después de haber cumplido 81 años falleció, de una falla hepática, la señora Estrella Giacomán Handal.

Oriunda de Monterrey, Nuevo León, ella fue la tercera hija del matrimonio que formaron Teófilo Giacomán Zogbi y María Handal Handal quienes además procrearon a Roberto, Kerim, Guillermo y Gerardo.

Nació el 15 de agosto de 1938 y se casó con Luis Abugaber Sara el 15 de agosto de 1957 en Monterrey.

Estrella Glacomán Handal.

Fueron novios durante dos años y medio y se conocieron porque los presentó su cuñada Mary Abugaber quien estaba casada con Amado Rizk, muy amigo de don Teófilo Giacomán.

Después de casarse, la pareja fijó su residencia en León donde ya vivía la familia de Luis, ya que cuando los Abugaber Sara llegaron a México, procedentes de Palestina y junto a sus tres hijos mayores, lo hicieron a Tampico, donde nació Luis. El clima de la ciudad y puerto, capital del estado de Tamaulipas, no era bueno para la matriarca de la familia y se cambiaron a León.

Ya avecindados en León, Estrella y Luis formaron una hermosa familia. Aquí nacieron sus hijos Luis Moisés casado con Patricia Salem (QEPD); Carlos Gerardo casado con Pily Portugal; Juan Antonio casado con Daniella Aranda; Emilio Salvador casado con Marytere Unzueta; Clara Estrella casada con Antonio Marún y Alejandro Jesús.

Foto: Especial.

Sus hijos le regalaron 16 nietos y ya no alcanzó a conocer a su primera bisnieta, que nacerá a finales de octubre.

Aunque Estrella estudió la carrera de Contaduría se dedicó amorosamente a su familia. Su gran pasión era cocinar comida árabe, dado su ascendencia palestina. También le encantaba jugar canasta con sus cuñadas, hija y nietas.

Su gran corazón la hizo una persona bondadosa y altruista. Por varios años llevó despensas a los principales asilos de la ciudad principalmente al de Las Madres Vicentinas y a la Ciudad del Niño Don Bosco.

Quienes la conocieron admiraban de ella su entrega incondicional, su alegría, su disposición para ayudar, su carácter servicial, su eterna sonrisa y su tino para dar siempre los mejores consejos.

Siempre la vamos a recordar como el gran pilar de la familia, como la gran Estrella que dejó su luz en cada uno de nosotros, que nos guio y nos dejó grandes enseñanzas. Nos demostró que por amor uno es capaz de entregarse a los demás con una sonrisa sin importar las circunstancias. Una mujer incondicional, que siempre tenía una palabra de cariño y apoyo para dar, amable, siempre dispuesta a ayudar y consintiendo a toda la familia, una mujer excepcional, única e irreemplazable”, destacó su hija Nena.

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