León, Guanajuato.- A partir de abril las cantinas podrán cambiar su licencia de venta de alcohol, lo que les permitiría no cerrar por completo incluso con si el semáforo de contagios COVID se encontrara en rojo.
El canje les permitirá no estar sujetos a la nomenclatura de las cantinas, explicó Javier Quiroga López, presidente de la Red Estatal de Restaurantes, Bares y Cantinas.
Detalló que los negocios que representa tienen más de veinte años y cuando adquirieron su licencia de alcohol no había la clasificación de restaurantes, solo cantinas.
Al inicio de la pandemia, a las cantinas se les clasificó como no esenciales, cuestión que Quiroga López consideró como un error por parte del Gobierno Federal.
Fuimos victimizados por considerarnos punto de contagio. Para efectos del servicio somos como restaurantes, el menú que manejan las cantinas incluye al menos diez platillos diarios”, explicó.
El año pasado se modificó la ley que los regulaba y actualmente se rigen bajo la Ley de Bebidas Alcohólicas, que les da una nueva clasificación en la que solo se consideran cuatro tipos de licencias, cuando antes había 21 tipos.
Con este cambio se unifican los establecimientos de venta de bebidas alcohólicas como restaurantes, cantinas y bares.
Esto nos va a permitir ya no estar sujetos a la restricción del semáforo”, precisó el empresario.
La modificación entró en vigor en septiembre del 2020, mientras se hacen las adecuaciones entrará en vigor a partir de abril de este año. Con esta modificación un semáforo rojo difícilmente los cerraría por completo.
El cambio de licencia es gratuito, lo que genera cobro es el refrendo de la licencia que hasta el año pasado tenía un valor de 6 mil pesos. Quiroga López precisó que se hizo la petición al Gobernador del Estado para poder pagarla de forma diferida y se les autorizó.
Ven dificil recuperarse tras un año cerrados
Respecto al cambio de semáforo de reactivación económica a amarillo, Javier Quiroga López precisó que será muy difícil recuperarse después de un año de estar cerrados.
Esperan crecer un 50% para lograr el punto de equilibrio para que los gastos salgan del propio establecimiento que se logra con el 60% de los ingresos y pagar trabajadores, insumos y servicios.
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El sector no podría resistir económicamente regresar a un semáforo rojo”, advirtió.
Al inicio de la pandemia eran mil 500 establecimientos afiliados en el estado, al cierre del 2020 se perdieron 522 negocios de este giro.
MCMH
