Liliana Amaro, coach de sueño y fundadora de Zzleep My Baby, recomienda la lectura como parte de la rutina nocturna para desconectar el movimiento y esfuerzo físico y relajarse con esta actividad antes de dormir.
Dejar la tecnología a un lado, ayudar a la concentración y memoria, incrementar el conocimiento y cultura, reducir el estrés, dormir mejor y tener un descanso reparador, son algunos de los beneficios que comparte la especialista.
Esto ayuda a estimular el sueño debido a que, por la noche, es una especie de ejercicio de relajamiento que puede sostenerse hasta que ya los ojos comienzan a cansarse y la concentración se desvanece poco a poco entrando a un periodo de trance que permite quedarse dormido súbitamente o decidir cuándo parar”, explicó Liliana.
Leer o contar un cuento se recomienda para los niños con la indicación de que cierren sus ojos y enseguida dormirán. Un adulto lo puede hacer en cama y es importante establecer una hora límite.
Si ya tienes como práctica la lectura y aún así no consigues dormir, hay que dejar el libro a un lado y apagar la luz, respirar profundamente 10 veces, pensar en cada parte de nuestro cuerpo y comenzar a imaginar cada página del libro que leímos. Es probable, que en algún momento te quedes dormido y si no es así, hay que imaginar hasta que se concilie el sueño”, concluyó.

