El 80 por ciento de los establecimientos que fueron afectados por la reducción del mobiliario en la vía publica, así como los que los retiraron, interpondrán una queja y suspensión ante el Tribunal de los Contencioso Administrativo (TCA), tal y como él los hizo, aseguró Ricardo Herbert Chico, dueño de Café Galería.
El empresario restaurantero aseveró que llevar un recurso de apelación ante tal situación va desde 100 a 300 mil pesos, “no es barato, hay que contratar abogados, y si alguien se veía perjudicado en un espacio muy pequeño o en una mesa, a lo mejor no le era redituable de ir a una demanda en contra de la autoridad”.
Hebert aseguró que el costo del proceso va de los 100 mil hasta 300 mil pesos.
El afectado señaló que aún no tienen respuesta del TCA, pero que independientemente del resultado, dialogarán con las autoridades para llegar a un acuerdo que beneficie a todos.
“La idea es sentarnos a platicar con las autoridades, para poder continuar con nuestras labores de manera normal”, setenció.
También comentó que si la resolución del TCA no les otorga la suspensión, cualquier empresario está en su derecho de seguir un procedimiento ante otra instancia, tal y como lo marcan las leyes mexicanas.
Ejemplificó el caso de Casa Valadez, a quienes los han crucificado por su derecho a defenderse, “a mí honestamente me pareció un poco injusta la crucifixión de uno los compañeros que hizo uso de su derecho legal de estar en la vía pública”, criticó Ricardo.
Finalmente dijo que si obtiene la suspensión dialogará con la autoridad, para llegar a una acuerdo y no politizar más el asunto.
