El Callejón del Beso es uno de los sitios más conocidos de la ciudad, los enamorados suelen darse un beso en el tercer escalón, pues se tiene la creencia que tendrán siete años de buena suerte.
Jóvenes y niños de la ciudad narran la leyenda de este histórico sitio, dicen que una joven llamada Ana se enamoró de un humilde minero llamado Carlos. Los enamorados se veían en misa, ocasionalmente cruzaban sus miradas pero no tenían la oportunidad de conversar, pues el padre de Ana era un hombre que nunca aceptaría la relación por el nivel social de aquel joven.
Sin embargo, Carlos hizo todo lo posible por rentar la casa que se encontraba justamente enfrente de la mujer que amaba, la distancia era mínima entre un balcón y el otro, así que era el lugar apropiado para conversar.
La tragedia sucedió cuando el padre de Carmen los encontró platicando, enfurecido, tomó una daga y la clavó en el pecho de su hija. Luis enmudeció de espanto, la mano de su amada cada vez se sentía más fría, lo único que hizo fue darle un beso en aquella mano tersa y pálida ya sin vida.
Hay un dato curioso en torno a la leyenda, a los personajes principales también se les llama Carmen y don Luis.
Con el paso de los años, el lugar ha sufrido algunos cambios en el suelo, un tiempo estuvo empedrado y luego enlozado.