“No espero que les guste, espero que haya diálogo”, dijo el joven artista Enrique López Llamas al finalizar la presentación de su exposición titulada “Impunity (I think should´ve stayed home)”, que se inauguró en la sala Guanajuato del Museo Iconográfico del Quijote.
Después del tradicional corte de listón, la audiencia observó un video realizado por el artista, donde se muestra atado en una silla y además, hay una persona que lo golpea ocasionándole varias heridas en diferentes partes del cuerpo.
Como parte de su exposición, al centro cuelgan tres muñecos de trapo que semejan desnudez al mostrar la forma de sus genitales, las tres figuras se mantienen colgadas del cuello, lo que hace parecer un suicidio, o una condena por algún grupo criminal.
La obra plástica, varias piezas que fueron quemadas, su mayoría entre un color negro y gris cenizo. Una exposición que permite al espectador conocer sobre la violencia que sacude el país de una manera artística.
Enrique López Llamas fue acreedor a una mención honorífica en la XVI edición del concurso Nacional de Artes Visuales del Museo y ganador del primer lugar en la edición 2013 del mismo certamen.
Se ha lanzado tras la búsqueda de un estilo propio incursionando de manera sorprendente en el realismo. Recientemente su búsqueda se ha ampliado hacia un arte más abstracto y la búsqueda de conceptos específicos.
“Impunity” cuenta con obras realizadas a través del collage, el aerosol, el acrílico y la utilización del fuego sobre la tela, algo que sin duda deja a descubierto la búsqueda de la individualidad tanto como artista y ser humano.