Sus cercanos dicen que la terquedad es uno de los mayores atributos y, al mismo tiempo, uno de los mayores defectos de Andrés Manuel López Obrador. Y justo eso es lo que se está viendo con su pretendida contrarreforma eléctrica. El Presidente insiste en una iniciativa que, simple y sencillamente, sólo sus aplaudidores apoyan.
El mandatario ofreció foros públicos (que hasta ahora no se han hecho) para explicar los detalles y alcances de la propuesta. Él mismo dijo que le explicaría el proyecto a Joe Biden y Justin Trudeau. Hace unos días mandó a los líderes de la industria privada con el secretario de Gobernación a que les resolvieran sus inquietudes. ¿Cuál ha sido el resultado? Que ninguno de los que han escuchado los argumentos ha salido a apoyar la contrarreforma.
Y ahí es donde entra la terquedad presidencial: insiste en “explicar” su propuesta, en lugar de admitir que algo debe andar mal cuando empresarios, académicos, organismos reguladores, inversionistas, partidos, embajadores, legisladores y un largo etcétera se oponen a esa reforma. ¿En serio todo el mundo está equivocado excepto el Presidente? ¡Qué curioso!
*
Uno de los casos más importantes sobre presunta corrupción en el gobierno de Enrique Peña Nieto podría tener un nuevo capítulo en estos días. Se trata del proceso contra los hermanos Rafael y Teófilo Zaga Tawil, acusados de apropiarse ilegalmente de 5 mil millones de pesos del Infonavit.
Hace una semana se llevó a cabo un cateo en Bosques de las Lomas, y quienes conocen el expediente dicen que en ese lugar la FGR encontró evidencias que vincularían a varios personajes cercanos a los empresarios. Se trata de Alfonso de Paula Rodríguez, quien es considerado su operador financiero; Moisés Nahmad, responsable del manejo de cuentas, y David Granados Palomino, ubicado como apoderado legal de los negocios.
Dicen que los fiscales están convencidos de que, ahora sí, podrán echarle el guante a Rafael Zaga Tawil y a su hijo Elías Zaga Hanono, quienes se encuentran prófugos desde hace un año. ¿Será?
*
Se fue el charro de Huentitán, pero los grandes éxitos de Vicente Fernández seguirán escuchándose con otras voces. “Por tu maldito amor”, se la canta con añoranza Rosario Robles a Enrique Peña. En tanto que AMLO le dedica a Donald Trump esa que dice: “Acá entre nos, quiero que sepas la verdad: no te he dejado de adorar”. Y la de “Hoy platiqué con mi gallo”, por increíble que parezca, Dante Delgado no se la canta a Luis Donaldo Colosio Riojas… ¡sino a él mismo! ¡Ay, dolor!
