CDMX.- Desde el pasado 17 de septiembre se encuentra disponible en Star+ la serie “No fue mi culpa” que retrata el tema de la violencia, feminicidios y afectadas por esta situación.
Realizada en tres versiones locales, para México “No fue mi culpa México”, Colombia “No fue mi culpa Colombia” y Brasil “No fue mi culpa Brasil”, ficciona historias de víctimas de feminicidios y de personas afectadas por todo tipo de violencia de género, inspiradas en hechos reales de mujeres de diversas edades, clases sociales y lugares de origen.

La nueva serie protagonizada en su versión mexicana por Paulina Gaitán (“Voces inocentes”), Damián Alcázar (“Crónicas”), Raúl Méndez (“Kilómetro 31”), Giovanna Utrilla (“El cordero y el mar”), Gonzalo Vega Jr. (“Después de Lucía”) y Vicky Araico (“Guerra mundial Z”) presenta en su apertura la poderosa “Canción sin miedo“, que desde marzo de 2020 viene sonando fuerte en todos los rincones de México.
Compuesta por la cantautora coahuilense Vivir Quintana, la canción ha acompañado en el último año y medio la lucha feminista y en contra de la violencia de género, con presencia en marchas, congregaciones y otros actos de protesta desde la Ciudad de México hasta Tijuana.

Esta canción ha sido elegida para abrir cada episodio de “No fue mi culpa”, acompañando las temáticas que allí se abordan. Quintana ofreció una versión especial de la canción, que a su vez será incluida en la edición colombiana y brasilera de la serie, con interpretaciones de cantantes locales.
“Canción sin miedo” nace con un propósito
Quintana la compuso en apenas unas horas en febrero de 2020, a pedido de la artista chilena Mon Laferte, quien quiso incluir una canción sobre feminicidio en un concierto que brindaría el 7 de marzo de ese año en el Zócalo de la Ciudad de México, como parte del Festival Tiempo de Mujeres.

Con ello, la serie pretende ser un ejemplo del compromiso de Star+ de contar historias relevantes y representativas que visibilicen estereotipos y contribuyan a romper con ellos en pos de una sociedad más igualitaria y respetuosa, en la que todas las personas se sientan protagonistas.
