México explotó de alegría con la adquisición de la medalla de bronce gracias a la selección mexicana de futbol.
Los jugadores habían hecho una promesa con sus familias y la cumplieron, traen a casa una medalla que pasará a la historia.
Después de 53 años México se venga por aquella medalla que se nos arrebató en los juegos Olímpicos de México 1968.
Jaime Lozano dejó abierta la puerta a la posibilidad de quedarse en el cargo, pese a que un día antes del choque con Japón aseguró que ya se iba.
“Venía a este proceso. Empecé hace casi tres años y sabía que estaría hasta los Juegos Olímpicos y después buscar qué más puede venir, comentó Lozano
“Yo estaría feliz de quedarme, me voy a sentar a hablar con Yon de Luisa, y Gerardo, nunca cierro las puertas, pero después se tomarán decisiones”.
