Barcelona.- El COVID los separó, pero el amor nunca los desunió. Esta historia es digna de un diario con pasión. Xavier Antó, de 90 años, y su esposa Carmen Panzano, de 92, han vivido 65 años en matrimonio, pero más de un año sin contacto físico debido a la pandemia mundial.
Y es que Carmen Panzano vive en un asilo en España, separada entre las paredes y los cristales de su esposo para evitar cualquier posibilidad de un contagio de COVID que ha matado a más de 3 millones de personas en el mundo.
Antó visita a Carmen Panzano tres o cuatro veces
Aunque Antó no puede entrar al asilo, visita a su esposa tres o cuatro veces por semana. A través de una ventana con cristal ve a Carmen Panzano, quien tiene Alzheimer.
El asilo está cerrado desde hace más de un año debido al COVID, pero los empleados apoyan con una silla y llama a Carmen Panzano.
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Antó le muestra fotos de nietos
Durante el encuentro, separado por el cristal, Antó le muestra a su esposa fotos de sus nietos que tiene en su teléfono.
Tanto Antó como Carmen ya están vacunados contra Coronavirus. Inicialmente, Antó solamente veía de manera virtual, es decir, por videollamadas, a su esposa. Ahora, lo hace presencialmente, pero sin contacto físico.
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(Con información de AP)
HLL