Ixtapaluca, Estado de México.- La mamá de Renata ya había alertado a las autoridades del peligro que representaba su expareja para su hija de 13 años. En vano denunció, la protegieron solo algunos meses y se acabó, así como la vida de su hija.
Durante la madrugada del lunes 30 de noviembre, la niña fue encontrada sin vida en su casa, en la colonia Chocolines. El cuerpo estaba colgado en una vida, inicialmente se pensó sobre un suicidio, pero tenía huellas de estrangulamiento. A la Fiscalía General de Justicia del Estado de México se le exige se investigue como feminicidio.
Karen, la madre de la menor, narró que hace como cinco meses advirtió a las autoridades sobre el peligro que representaba su expareja, inicialmente recibió protección, pero fue temporal.
Después de cinco meses mi hija está muerta, mató este tipo a mi hija porque está enfermo, ellos no fueron para buscarlo, ni para llamarlo a atestiguar, para nada. Yo hace cinco meses levanté una demanda porque este tipo quiso violar a mi hija en el baño”, declaró.
Exigen justicia
A partir del jueves, familiares, amigos y organismos de colectivos feministas marchan por las calles de Ixtapaluca para exigir justicia.
Los manifestantes cargan con una fotografía de Renata, recorren las calles y han realizado mitines en la presidencia municipal.
Las consignas son contra los tres órdenes de gobierno.
Karen contó que tras el homicidio, las autoridades le pidieron no publicar nada del caso, pero la señora se ha dado cuenta que la han ignorado.
La alcaldesa Maricela Serrano Hernández recibió a Karen y le prometió ayuda jurídica y sicológica.
HLL
