México.- Las luces de colores que adornan los árboles de navidad se han establecido como una de las tradiciones más arraigadas de las fiestas decembrinas, y hoy es muy fácil conseguirlas en cualquier tienda en sus muchas versiones.
¿Pero de dónde surgió esta tradición y qué significa?
Todo comienza en el siglo XIX, cuando se establecieron los principales conceptos que definen la navidad. Santa Claus, por ejemplo, apareció por primera vez en un poema en 1823, mientras que el cuento “Canción de Navidad” de Charles Dickens se publicó en 1843.
Es alrededor de esa época cuando se populariza el árbol de navidad, que proviene de la tradición alemana del “tannembaum“ y que en un principio estaba consagrado al dios nórdico Frey, y representaba al árbol del universo de la mitologia vikinga, llamado “Yggdrasil”.
Sin embargo, se dice que fue San Bonifacio, evangelizador de Alemania, quien le cambió el significado a esta tradición, y el árbol de navidad pasó a ser una representación cristiana.
De hecho, estos primeros árboles ya eran adornados con luces, que al igual que las series actuales, representaban el nacimiento de Jesús como la luz que llegaba a un mundo en tinieblas, aunque esas luces provenían de velas, lo que ocasionaba muchos problemas de incendios.
Así fue hasta que el ingeniero Edward Hibberd Johnson tuvo la idea de sustituir las velas con focos, y la implementó junto a su amigo y socio, Thomas Alva Edison, que en 1880 acababa de inventar la bombilla eléctrica.
Finalmente, en la época decembrina de 1882, Edward conectó ochenta bombillas de colores azul, blanco y rojo en una serie, las montó sobre su árbol y las conectó a un generador. Al notar la belleza del efecto producido, llamó a un reportero para que publicara acerca de su nuevo invento, y a partir de ahí comenzó la tradición.
Cincuenta años después, para 1930, ya había luces en los árboles de navidad de millones de hogares alrededor del mundo, y hoy, ya son una tradición clásica de la época de fiestas.
Con información de Milenio Diario.