León y Toluca dejaron para mejor ocasión su clasificación matemática a la Liguilla al empatar a dos goles en un cierre frenético de partido, donde a los Verdes sí les pasó factura la ausencia de un manejo de juego del León más parchado de la temporada.
León rozó el cielo cuando una volea de Mauricio Castañeda culminó una gran faena de Hernán Darío Burbano sobre Óscar Rojas a quien tuvo de cliente todo el encuentro y que parcialmente significaba un triunfo.
Pero no fue así y los Verdes escogieron el infierno que se conjugó con el suplicio de ver pasar los minutos cuando el marcador no era el que otorgaba los tres puntos, mismos que aseguraban la Liguilla desde ya, en un partido que pasó del orden y el buen futbol a la garra y los goles.
Fueron quince minutos los que León tuvo que esperar para adueñarse de las acciones y comenzar a ganar el medio campo a un Toluca que a pesar de mandar todo su arsenal de ataque desde el inicio, fue carente de idea y poco a poco cedió la iniciativa al local.
Y es que Fernando Navarro junto a Juan Vázquez comandaron una media cancha que abrió el juego con Elías Hernández y Hernán Burnano, este último que cumplió con la mejor noche del presente campeonato.
En su primer intento Burbano recorrió la milla por pradera izquierda y recortó a Rojas para sacar un potente disparo a los guantes de Alfredo Talavera que sólo rebotó el balón. Al 16´ Fernando Navarro cimbró el poste derecho de “Tala” .
León jugaba de una forma tan práctica que no notó las cinco bajas titulares de Márquez, Loboa, Hernández, Montes y Peña. La recompensa se dio en el 37 cuando Gallo Väzquez recuperó un balón en la media cancha y filtró a Burbano que dribló a Rojas y Gamboa para meter un tiro centro donde llegó barrido Boselli y Pinto para que el escarlata mandara el castigo a su propia meta.
La segunda mitad planteó un Toluca más ofensivo y fue el nuevo líder de goleo quien cascó la suya. Un centro espléndido de Antonio Ríos dejó solo en el área a Pablo Velázquez que ante la displicencia de Arturo Ortiz y Jonny Magallón marcó el empate a uno.
La respuesta de León fue con la entrada de Franco Arizala que rápido montó su show. Al 78 puso una pelota de gol a Boselli que cometió la pifia de perder de vista el balón que fue de largo y que Burbano rescató para volver a pintar la cara a Rojas que culminó con un centro a pedir de boca para el “Santana” que de volea sentenció la suerte de Talavera.
Parecía que León se llevaría la noche, el buen futbol y los tres puntos de su campo, pero una desconcentración de la defensa echó a perder todo. El balón quedó muerto en el área tras un mal rechace de la zaga sólo para que Velázquez llegara y con suavidad mandara el balón a mecerse en las redes.
León llegó a 26 puntos y seguro estará en la Liguilla.
«En 5»
León estuvo a punto de quedarse con el triunfo pero dos sorpresas les quitaron la oportunidad.
1.-Fernando Navarro estuvo cerca de marcar el primer gol de León pero su disparo fue directo a la base del poste de la portería defendida por Alfredo Talavera.
2.-El premio al buen juego llegó para León al minuto 37, cuando Darío Burbano metió una asistencia de gol que terminó dentro de las redes escarlatas.
3.-La mejor ofensiva del torneo fue bien contenida en el primer tiempo por León, Pablo Velázquez estaba desquiciado ante la marca de Nacho González.
4.-Mauricio “Satana” Castañeda cazó el segundo de la noche que prometía una victoria de los locales. El gol estuvo lleno de magia y contundencia.
5.-La afición local coreaba la victoria cuando Pablo Velázquez se permitió subirse al liderato de goleo con su segundo de la noche en el Nou Camp.
Lamenta Matosas fallas de oportunidades
Para Gustavo Matosas el único error que puede achacarle a sus jugadores luego del empate es no haber concretado las oportunidades que se generaron en el primer tiempo, detalló el técnico.
Aceptó que le dejó un mal sabor por que sus jugadores dieron todo en el campo, respondieron a las ausencias de sus 5 titulares y no se cerró con un triunfo.
“A grandes rasgos, sin volver a ver el juego creo que nos faltó convertir las chances del primer tiempo, me deja un sabor amargo el ir arriba y que nos empataran, pero me deja al mismo tiempo un buen sabor de boca por el juego de mis jóvenes y por los que entraron a suplir las ausencias”.
Comentó que deja en manos de sus directivos la posibilidad de conseguir a sus jugadores para el encuentro con Tigres “porque el equipo se está jugando mucho en lo institucional, deportivo y económico y yo con lo que tengo pongo lo mejor en el campo”.
Señaló que sin duda espera a sus jugadores con los brazos abiertos.