Valencia – 45 años después de que saliera a la luz el caso de un sacerdote que le propinó 47 puñaladas a un monaguillo la nota se volvió a viralizar en el mundo de las redes sociales.
Se trata de un sacerdote de nombre José Prat quien colocó 47 puñaladas al niño y monaguillo Francisco Calero Navalón de apenas nueve años de edad en Valencia en 1971. Tal hecho convulsionó a una nación que se informaba todavía en tintes de blanco y negro, relató de manera reciente el diario ibérico “El País”.
Tras el horrorífico suceso el sacerdote terminó por ser condenado a 17 años prisión mismo que no cumplió. Según un libro publicado en 2004 por la orden a la que pertenecía, la de los misioneros paúles la familia se sintió engañada ya que les dijeron que el cura había sido excomulgado, pero lo cierto es que solo pasó ocho años en el retiro.
Los hechos sucedieron al interior de la iglesia
Era el martes 2 de marzo de 1971 cuando el sacerdote acudió a la parroquia de Nuestra señora de la Begoña en donde oficiaba de forma temporal ya que unos meses atrás el párroco titular había fallecido. Fue ahí donde buscó al niño apodado ‘Paquito‘ sacándolo de la escuela alegando que lo necesitaba para posteriormente llevarlo hacía el templo en donde lo acribilló a puñaladas, previamente le había golpeado la cabeza.