Un medallón de oro en el cuello incentiva a Yésica Yadira Hernández a pensar en los demás. La campeona olímpica en su regreso a casa, al gimnasio, a su vida cotidiana, quiere repartir volantes en la escuela con la finalidad de que más jóvenes se interesen por su disciplina, el levantamiento de pesas.
A decir por Yésica Hernández, desde la consecución de la medalla de oro en los pasados Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018, se puede abrir una brecha de suma importancia para los selectivos del deporte, porque el ejemplo está puesto. Sólo falta motivar a las nuevas generaciones y Yésica cree saber cómo.

“Yo digo que sí va a cambiar (la escuela de levantamiento de pesas). Quiero hacer volantes y repartirlos en la escuela para que los niños se motiven a hacer deporte y quieran seguir sus sueños”, comentó Hernández.
Ahora, la vida le ha cambiado tanto a Yésica Yadira, que de un día a otro, podría convertirse en favorita tanto por ser galardonada con el Premio Estatal del Deporte y el Premio Nacional del Deporte, siendo que en ambos ya está postulada. Esto, apenas cuatro años después de que cargó por primera vez la barra.
“Cuando inicié no esperaba llegar a tanto, pero antes de los juegos sabía que podía ganar la medalla de oro porque para eso me estuve preparando y quiero seguir así para representar a México”.

“Quiero llegar a todas las competencias internacionales y llegar al pódium sin importar si quedo primero, sino en cualquier lugar”, culminó Yésica Yadira Hernández.
Su trayectoria
2015 – Cuarto lugar en Olimpiada Nacional
2016 – Primer lugar en Olimpiada Nacional
2017 – Sexto lugar en Mundial de Tailandia
2018 – Primer lugar en Juegos Olímpicos de la Juventud
