A pesar que desde el 2013 se hicieron pruebas y hasta se adquirió equipo, el sistema de “fotomultas” tendrá que esperar un buen tiempo, pues hay otras prioridades, además de que no se cuenta una base de datos de autos que se requiere, dijo el Secretario de Seguridad municipal, Luis Enrique Ramírez Saldaña.
Luis Enrique Ramírez Saldaña
“Es un proyecto (fotomultas), que a final de cuentas se ha tenido ahí entre propuestas. Las prioridades en materia de vialidad es la semaforización, los sistemas centralizados, el respeto a los carriles exclusivos del SIT, la cuestión de la operatividad, el fortalecimiento de los elementos.
“El tema de fotomulta se tendría que revisar muy a fondo, porque al final es otro tipo de tecnología que se tiene que identificar bien. Es un tema que se tiene que tratar con pinzas. Actualmente se cuenta con tecnología para poder controlar o revisar lo que es la vialidad”, señaló el funcionario.
Reconoció que en 2013, siendo director de Tránsito Municipal, Hugo Solórzano Esqueda, se hicieron pruebas para implementar un sistema de “Fotomultas” en las principales vialidades, como fue en Alonso de Torres, pero luego se dejo en el olvido los equipos adquiridos.
El funcionario dijo que prefieren adquirir equipos de videovigilancia para estar cuidando las principales vialidades, en vez de contratar una empresa que se haga cargo de ésta, por los altos costos que representa y el poco beneficio que trae al municipio.
“No estamos como de acuerdo en contratar a una empresa para que venga operar el sistema, pues se requiere una base de datos que no tenemos nosotros (en Tránsito Municipal), y tendría que ser directamente con la Secretaria de Finanzas del Estado”.
El Secretario reiteró que el proyecto de “fotomultas” es un proyecto que no está madurado, y la tecnología con la que cuenta Tránsito se ha estado utilizando.
En el 2013, la dirección de Tránsito Municipal comenzó a realizar pruebas para instalar equipo de alta tecnología para infraccionar a automovilistas que no respetan los límites de velocidad.
Se explicó que se trataba de un sistema tecnológico que puede detectar a través de un radar a automovilistas que rebasan los límites de velocidad permitidos.
Las cámaras detectan los vehículos, toman la foto, con número de placas, se envía a la central y se procesa la multa que es enviada al domicilio del infractor.
Se instaló el primer equipo en el transitado bulevar Alonso de Torres, a la altura del fraccionamiento El Rosario.
Se colocó en la “bandera” de señalización una pantalla digitalizada, donde hay un radar que registra la velocidad a la que circulan los vehículos. Ahora todo ha quedado en el olvido.
