La Asociación Nacional del Rifle (NRA) ha guardado por años documentos relacionados con sus interacciones con un banquero vinculado al Kremlin, preparándose para una posible investigación, según reportes de la cadena CNN.
El Congreso de Estados Unidos estaría revisando las finanzas de la NRA y sus vínculos con Alexander Torshin, uno de los 17 prominentes funcionarios del Gobierno ruso al que el Departamento del Tesoro impuso sanciones.
La Asociación ha dicho que está reconsiderando su relación con Torshin, quien es miembro vitalicio de la NRA, a raíz de las sanciones.
La renovada atención ha puesto en relieve la alianza estrecha, aunque a veces incómoda, entre los principales funcionarios de la asociación y Rusia.
Las investigaciones podrían arrojar luz sobre las prácticas de recaudación de fondos y las actividades políticas de la NRA, que gastó 30 millones de dólares en 2016 para apoyar la candidatura de Donald Trump a la presidencia, más de lo que gastó en las candidaturas de 2008 y 2012 juntas, según el Center for Responsive Politics.
El FBI recientemente empezó a investigar si Torshin canalizó dinero de manera ilegal a través de un grupo para apoyar la campaña de Trump, según un informe de McClantchy.
La NRA ha negado públicamente cualquier contacto con el FBI e insistió en que no ha aceptado donaciones ilegales.
Aunque niegan sus vínculos, los funcionarios de la NRA se preparan para una posible investigación al recopilar años de documentos que mencionan a Torshin y a su asociada, María Butina, quien dirije un grupo a favor de las armas en Rusia, según fuentes con conocimiento de la situación citadas por CNN.
Torshin, jefe adjunto del banco central de Rusia, sirvió durante años como senador en el Parlamento ruso e incursionó en la NRA con la ayuda de Kline Prenston, un abogado de Tennessee.
Preston, quien dijo que conoce a Torshin desde hace una década, dijo que el ruso quería reunirse con los líderes de la NRA por lo que le puso en contacto con el presidente de la asociación, David Keene.
“Puedo ciertamente decir sin reservas que la intención de Torshin era puramente ayudar con la expansión de los derechos sobre las armas”, dijo Preston.
“Infiltrarse para influir políticamente en la NRA es falso”.
Por otra parte, algunos miembros de la asociación tomaron la relación con Torshin con cautela.
Cuando Donald Trump Jr., hijo del Presidente de EU, llegó a la cena anual de la NRA en 2016 en Lousville, algunos asistentes, incluidos funcionarios de la asociación, se sorprendieron al encontrar a Torshin y Butina presentes en la recepción, según fuentes citadas por CNN.
Ambos no fueron invitados a la cena, pero se les pidió que se quedaran y hablaran de todos modos.
El encuentro dejó a algunos funcionarios del grupo preguntándose si se trataba de algún truco por parte de los rusos.
