Vivió un partido intenso, desde el primer minuto al filo del área técnica. El gol de penal en los últimos minutos fue como un balde de agua fría.

Rubén Omar Romano salió de la cancha con semblante de frustración tras la derrota de 1-0 frente a los Rayados del Monterrey.

“Sí, (estoy) frustrado porque creo que el equipo se partió el alma con un hombre menos, si bien teníamos poca llegada el Monterrey no tuvo ninguna en el segundo tiempo y cuando estaba controlado el partido cometimos un error y nos costó los 3 puntos”, dijo el técnico rojinegro.

“Un punto servía, pero servía más que nada por lo anímico por el esfuerzo que había hecho el equipo”.

El resultado lo dejó intranquilo aunque destacó la actitud mostrada por sus jugadores durante todo el encuentro.

“Lo que hizo el equipo especialmente en el segundo tiempo mostró corazón, garra y orden”.
“Lamentable que nos quedamos con dos jugadores menos y no nos puede pasar, entran 11 y salen 11, en estos momentos no podemos dar ese tipo de ventaja, más allá de que el equipo se mató”, agregó el DT.

En medio de su frustración, Romano fue irónico con la actuación del árbitro central Adonaí Escobedo, que expulsó a Rafa Márquez y a Milton Caraglio, jugadas divididas las marcó en favor de los Rayados y señaló dos penales.

“Exactamente, cuando está tan obvio ¿para qué opino? Prefiero no opinar del arbitraje”.

A falta de dos partidos de los involucrados en no descender, los Rojinegros están en la posición 17 de la tabla de cociente, 8 puntos arriba del Veracruz; hoy los Tiburones Rojos visitan a Lobos BUAP y Querétaro al Toluca.

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