Ante la cercana edición de la Feria Estatal de León Luciana Miranda Pons, Reina de la Ciudad, rindió su informe de actividades en el Auditorio del Centro Cultural y Ecológico Imagina.
Después de un año de labores altruistas deja el cargo, con la satisfacción de haber ayudado a personas con diferentes problemáticas, con acciones que salieron directo de su corazón.
“Tal vez he dado muy poco, si se compara con todo lo que se necesita pero lo he dado con mi corazón, mi alegría, el gusto por servir a los demás”, dijo.
El evento inició con una proyección de un vídeo en el que Luciana habló sobre la enfermedad con la que nació, Síndrome Kawasaki, que afecta a un niño entre un millón, y que la motivó desde niña a ayudar a las personas que tuvieran algún tipo de problemática.
“Después de eso (enfermedad) estaba segura de lo que haría en el futuro con mi vida, tenía que estar relacionado con ayudar a la gente y para mi la forma de aportar algo, siempre fue con una sonrisa, hasta que tuve la fortuna de ser Reina de la Ciudad”, compartió.
A pocos días de su nombramiento como Reina de la Ciudad, bajo el lema “Una sonrisa nunca falla”, Luciana comenzó a actuar en pro de los más necesitados.
“Tal vez el haber nacido con un corazón y pulmones frágiles, pasar aquellos días en cama y con fiebre, se ha convertido en empatía con las personas que sufren”.
Al paso de los meses Luciana trabajó con diferentes asociaciones altruistas entre ellas el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) León, con el cual, en conjunto, realizó acciones para apoyo a los más necesitados.
La soberana dijo haber conocido a muchas personas durante su reinado, pero Juan Carmelo Padilla Muñoz, un hombre de 39 años que nació con parálisis cerebral, esclerosis, esclerosis múltiple, artritis, glaucoma entre otras, marcó su vida.
Él la inspiró en diferentes maneras ya que a pesar de sus enfermedades ha enfrentado la adversidad lleno de fe y optimismo; Juan Carmen imparte clases de regularización a niños de todas las edades de su colonia con dificultades para aprender.
“Es un ejemplo para todos al demostrarnos que, a pesar de las pruebas que se nos presentan en la vida, siempre podemos sacar lo mejor de nosotros a favor de los demás”.
Luciana mencionó que las personas a veces no hacen las cosas por limitaciones que ellos creen que se los impiden, y cito la frase de Luis Carmen “Nadie tiene una discapacidad, tiene una limitante o problema, pero no discapacidad”.
“Con esto aprendí que la discapacidad está en nuestros ojos al no ver que existen personas que sufren o que requieren de nuestra ayuda, la discapacidad está en nuestro corazón al no poder sensibilizarnos con el dolor de lo demás”.
Algunos de los logros que Luciana resaltó fue la donación de 2 mil estudios médicos, calzado, sillas de ruedas, toallas, cobijas y una lavadora, todas estas acciones en favor de los más necesitados.
Agradeció el apoyo que le dieron su familia; Héctor López, alcalde de León y su esposa Lula; sus princesas y las personas que la ayudaron.
“Agradezco sobre todo a una persona que me inspiró, a una persona que paso todas esas fiebres a mi lado, mi mamá, gracias ‘ma’ por inspirarme, espero yo inspirar a los demás como tu lo has hecho conmigo”.
Asistienron Lourdes Solís, presidenta del DIF León; Gabriel Pérez, presidente del Patronato de la Feria Estatal de León y Emilia Ramírez Huerta, quien sucederá a Luciana.
“Mi vida se resume de forma sencilla: ser feliz y hacer feliz a la gente, aún faltan muchas ‘estrellas’ por ayudar, mi reinado termina, pero las ganas de seguir ayudando, no, entonces lo voy a seguir haciendo”,
