El “Tigre” Sepúlveda le dio otro zarpazo al América.
“Se te olvida, que siempre has estado abajo de las Chivas, que llevamos siete años cicatrices.
“Cuando ganas, ya sabemos que les dan muy buenas primas, y a los árbitros, hermanas y propinas,” le cantó al América, Guillermo Sepúlveda, miembro del Guadalajara campeonísimo, que quiso dedicarle su investidura al rival de toda la vida.
Y es que el martes, parte del escenario se pintó de rojiblanco, pero no sólo por la presencia del “Tigre”, de Ramón Ramírez y Matías Almeyda, sino que además de Ignacio Calderón, que igual se desvivió por el Guadalajara.
“Estoy inmensamente feliz, tengo que agradecer a muchas personas que estuvieron considerándome durante mis 18 años como profesional al llevarme a un puesto muy difícil como la portería”, explicó “Nacho” Calderón.
Con diferentes contrastes, pero ayer, en la fiesta del futbol, Chivas hizo acto de presencia desde sus leyendas, las que maquillaron los tragos amargos de el Rebaño en la actualidad, y que hasta valieron para que el “Pelado” terminara la noche con una sonrisa y con el compromiso de honrar la historia que construyeron futbolistas como Calderón y Sepúlveda.