Una pareja denunció a través de sus redes, a un cura de la Iglesia de la localidad rionegrina del Ingeniero Huergo, en el departamento General Roca, quien se negó a bautizar a su hijo de 3 meses de edad, pues había sido concebido mediante inseminación artificial.

Cristian Gariglio, de 43 años, aseveró que el sacerdote le dijo a él y a su mujer que su bebé “era fruto de un pecado”.

Desde hace 12 años, la pareja conformada por Soledad Castillo, de 32 años, y Cristian Gariglio, estaban en busca de un hijo, pero ella no podía quedar en cinta, por lo que cuando lo lograron, quisieron que el pequeño fuera bautizado al igual que toda su familia, generación tras generación en la misma Iglesia.

Los padres jamás imaginaron que se encontrarían con una respuesta así, y quisieron entonces exponer la situación.

“Queremos bautilizarlo acá y cuanto antes. Esperemos que el cura recapacite o sus superiores hablen con él para que acceda. Si no, tendremos que irnos a General Roca o a Villa Regina”, dijo el padre de Pedro Amaranto, el pequeño.

El miércoles pasado Soledad fue la única que solicitó el turno para bautirzar, así como los requisitos para dicha ceremonia. El cura le brindó la información y a la vez, indagó en su matrimonio. Le pregunto si estaban casados, y el motivo del bautizo.

Le preguntó también su edad, y aunque creyó que el no estra casados le impediría la ceremonia, el cura no se opuso ante ello.

El problema real vino después, cuando Soledad le contó la travesía que habían transcurrrido para llegar a donde actualmente se encontraban. Al decirle que en el tercer intento de inseminación quedaron embarazados por fin, el cura respodió:Hasta acá llegamos, el hijo de ustedes es fruto de un pecado”.

El cura, de origen polaco, es ortodoxo según fuentes, y por este motivo, les pidió ir a misa diariamente hasta diciembre, así como ir con los padrinos del bebé.

No les dio certeza de bautizo, y además les comunicó que serían evaluados si concurrían a la Iglesia. Ante este hecho se dieron cuenta de la imposiblidad de que todo sucediera, pues el padrino vive en Maquinchao, por lo que decidieron hacer público lo que estaban viviendo.

La historia fue rápidamente viralizada, y demostró la solidaridad para los involucrados, pues no existe nada que impida que un bebé concebido in vitro no se pueda bautizar.

“Mi señora se fue con una impotencia enorme. Estar esperando tanto ser padres y que un hombre te diga esto, por más que sea cura, es terrible. No hemos vuelto a tener diálogo con él”, comentó Cristian.

Otros vecinos hicieron la notación de que no era la primera vez que el padre tenía un problema por su manera ortodoxa de actuar y profesar la fe católica.

La pareja también denunció la discrimación ante el incidente por parte de la localidad cuando aún no eran padres. Pidieron en la comuna religiosa acceder a un terreno financiado en cuotas porque no tienen casa propia y, según Cristian, el hombre les dijo que no podía porque no ayudaban a personas sin hijos.

Sin embargo, cuando viajaron a Buenos Aires para someterse a la tercera inseminación, al regresar se enteraron de que les habían ofrecido lotes a varias jóvenes que no eran mamá.

Ingeniero Luis A. Huergo es un municipio autónomo del departamento General Roca, en la provincia de Río NegroArgentina.

 

 

Con información de Cadena3; RíoNegro
 

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