La constructora brasileña Odebrecht, empresa que ha protagonizado el mayor escándalo de sobornos de América, pagó 15 millones de dólares en comisiones a empresarios y altos funcionarios peruanos a través de ocho cuentas en la Banca Privada d’Andorra (BPA) para lograr la concesión de obras en el país.
El documento -fechado el pasado 8 de mayo- rastrea las transacciones de la constructora con el banco de Andorra entre 2008 y 2015. El texto, ordenado por la juez instructora del caso BPA, Conólic Mingorance, señala que Odebrecht pagó a los funcionarios a través de cuentas abiertas BPA a nombre de sociedades panameñas. Posteriormente, la constructora ideó un sistema que permitió recuperar el dinero mediante una red de testaferros y bancos en Estados Unidos, China, Alemania, Bahamas y Suiza.
“En todos los casos, las estructuras de las cuentas tienen en común que están destinadas a ocultar el verdadero beneficiario. El motivo del uso de testaferros y sociedades ‘offshore’ es evidente: evitar conocer quién paga y quién recibe”, señala el informe de las autoridades de Andorra.
La sociedad Ammarin Investment se encuentra respaldada por una cuenta en la BPA controlada por el ex vicepresidente de la estatal Petróleos de Perú Miguel Atala Herrera.
Odebrecht ingresó al ex directivo -nombrado durante el mandato del ex Presidente Alana García (2006-2011)- un total de 1.3 millones de dólares, una cifra que supone más de un tercio de lo reconocido hasta ahora.
La petrolera firmó cinco meses después de la salida de la empresa de Atala Herrera un acuerdo con Braskem -filial de Odebrecht- para estudiar la ejecución de una planta petroquímica de 3 mil millones de dólares.
Asimismo, otros ex funcionarios como Gabriel Prado Ramos, ex director de Seguridad Ciudadana de Lima y ex responsable de la Empresa Municipal de Peajes de Lima (EMAPE) entre 2011 y 2014, fue vinculado con una cuenta BPA.
La firma Aeon Group, propiedad de Odebrecht, gestionó la apertura de su depósito en agosto de 2013, la cual sólo recibió 3 mil 600 dólares en dos años, pese a ser abierta con la intención de ingresar una inversión de un millón de dólares.
Prado Ramos tuvo un importante nexo con la adjudicación de obra pública debido a su labor como responsable principal de EMAPE, lo que, según la Policía, explicaría el interés de Odebrecht por el funcionario.
Otros de los altos mandos relacionados con la revelación de la Policía fue el ex diputado del Congreso por el Partido Popular Cristiano (PPC) Jorge Horacio Canepa Torre, quien recibió una transferencia de 1.4 millones de dólares en una cuenta de BPA abierta para cobrar supuestos trabajos de consultoría.
Canepa retiró de su cuenta un total de 332 mil dólares a través de seis transferencias a bancos extranjeros entre 2014 y 2015, viajando a depósitos en Nueva York y Hong Kong.
La conexión de Canepa con Odebrecht data de su etapa como árbitro de la Cámara de Comercio de Lima, donde emitió entre 2009 y 2015 un total de 16 litigios a la firma en Perú, generando ganancias de 254 millones de dólares, según datos del portal Idl-reporteros.
Por otra parte, Rómulo Jorge Peñarada Castañeda, presidente de la consultora Alpha Consult -una de las mayores adjudicatarias del país, según la Policía- fue vinculado con una cuenta de BPA abierta en mayo de 2010.
A través de dos sociedades, Odebrecht ingresó en la cuenta familiar 2.6 millones de dólares.
Peñarada justificó ante la BPA el depósito como instrumentos para facturar a Odebrecht servicios de consultoría.
Sin embargo, las pesquisas enmarcan la cuenta en una mecánica propia del cobro de sobornos.
