Ganar en casa se ha vuelto algo extraño para la afición del León, pero el anhelo de la afición por ver triunfar a los suyos siempre es mayor a cualquier crisis y por ello la gente no deja de ir al Nou Camp.
Luego de seis jornadas terribles, a los aficionados del León solo les quedaba esperar que la mala racha acabara.
“Antes a los equipos les daba miedo venir al estadio por que siempre vamos adelante en casa, nosotros también pesamos pero ahora no sé qué pasó, nos hemos cansado”, explicó Adrian Pérez, aficionado de hueso colorado a La Fiera.
“En la copa vamos muy bien, pero en la liga que es el partido importante no podemos repuntar, no estamos en los mejores lugares como debemos”, agregó Fabricio Guerrero.
Aunque ayer, contra Santos, la abundancia de playeras verdes no solo fue por los aficionados locales. Un importante número de seguidores de Santos acudió a la ciudad, o algunos que viven aquí por fin pudieron apoyar a su equipo.
“Siempre que jugamos así es lo mismo, nos ponemos la playera, la confunden pero cuando la ven mejor se dan cuenta de que es diferente, no sé que le hice para que le fuese a Santos”, explicó Javier Tejera, aficionado que llegó acompañado de su hijo “lagunero”.