Claudia Zapiain Ascencio
La marca Parral 14 nació hace un año y medio, bajo la iniciativa de Gabriela y Claudia Zapiain Ascencio, quienes buscaron traer a México el estilo western del viejo Oeste, por medio de sus piezas de joyería.
Gabriela radica en Estados Unidos y Claudia en León, con lo que crean una mancuerna perfecta que busca ‘atacar’ dos países tan cercanos territorialmente, pero tan lejanos entre sí.
“Parral 14 nació a raíz de una necesidad de hacer cosas con materiales naturales, que no estuvieran vistas en el mercado y traer a México un estilo western que aquí no se acostumbra ver, por eso se trató de innovar para adecuarlo a los diseños mexicanos”, nos dijo Claudia.
Gabriela tiene el control de la parte creativa del negocio, mientras que Claudia se encarga de todo lo relacionado con lo comercial, administrativo y de mercadotecnia.
“Hace algunos años colaboraba una escuela de diseño de modas, por eso tenía muy presente que la mercadotecnia y la moda siempre van de la mano, principalmente para comercializar los productos”, dijo Claudia.
Claudia decidió refrescar conocimientos y actualizarse con el diplomado de Fashion Marketing, mismo que le ayudó a fortalecer algunas áreas de su negocio.
El módulo Marketing de Moda fue uno de los que más enseñanzas dejaron en Claudia, ya que Marcela Cárcoba se encargó de ayudar a los alumnos a aterrizar en papel el sueño de los emprendedores con los procesos teóricos.
Por su parte Karina Fernández, en su participación en el mismo módulo, ayudó a Claudia y sus compañeros a saber cómo vender su producto o servicios usando estrategias de venta adecuadas.
Las herramientas del diplomado que más sirvieron a Claudia son las estrategias para manejar las redes sociales en base a su horario y el tipo de persona que quieres llegar, además logró definir su marca y saber que el diseño de su página web es primordial en sus actividades a corto plazo.
“Yo recomiendo a los emprendedores que se informen, aprenda, crean en sus productos y marcas, busquen especialistas en cada ramo para que no se queden en ese sueño sino que llegan a volar muy alto”, finalizó.
Juan Manuel Sánchez Domínguez
El licenciado en Administración y Creación de Empresas, Juan Manuel Sánchez, inició hace tres años su negocio el que hace un año y medio derivó en “León Blanco”.
La empresa fabrica y comercializa accesorios para caballero.
“Creemos que el sector masculino es un nicho de mercado con un gran potencial, ya que el hombre de hoy en día está en un punto intermedio entre lo desalineado y el que buscar verse bien”, dijo Juan Manuel.
Para él los accesorios hacen la diferencia de estilo en cada persona, ya que dan el toque que fortalece la identidad que cada quien quiere proyectar con su imagen.
El diplomado de Fashion Marketing del Tec le ayudó a aterrizar conocimientos que él ya tenía pero que no sabía como plasmarlos en su marca.
“Después del diplomado se fortalece todo el conocimiento que ya tenías, y entiendes como direccionar, enfocar y aterrizar todo con tu experiencia profesional”.
“Vamos a lanzar una colección de 12 brazaletes. Descubrí que cada producto debe de tener una personalidad y debe tener su propio protagonismo, por eso en esta ocasión vamos a lanzar microcampañas publicitarias por cada estilo para reflejar la identidad individual que queremos proyectar”.
Los módulos de historia de la moda con Gabriel Ibarzábal, creador del blog de moda Latin Fashion News y el de visual merchandising con Emilio Ortega, encargado diseño y creación de escaparates de marcas de lujo, son los que más le gustaron a Juan Manuel por el amplio panorama que tienen sobre el mundo de la moda.
Juan Manuel recomienda a los emprendedores de negocios de la moda, que balanceen en todo momento la parte comercial y de diseño.
“De nada te sirve irte completamente a lo comercial y que dejes de lado la inspiración que enamora al cliente con los diseños, pero también se debe entender que de amor nadie vive. Me gustó expandir mis conocimientos, creo que abrí aún más mi panorama de la moda y la mercadotecnia además que hice relaciones públicas porque el diplomado concentra personas con un fin común y que hablan el mismo idioma de negocios. Es interesante porque están empezando a surgir relaciones comerciales”, finalizó.
Aranza Pérez Lobera
Mientras cursa su primer semestre en Administración Financiera y con un año de experiencia laboral en la empresa de calzado Perlob, Aranza Pérez Lobera se adentra en los conocimientos del mundo de la moda y la mercadotecnia.
La joven de 18 años apoya a su hermana y fundadora de la marca, Lucero Pérez Lobera, con las redes sociales y la Mercadotecnia de Perlob, por lo que el diplomado en Fashion Marketing le sirvió para complementar y aumentar sus conocimientos en este ámbito.
“En el diplomado he descubierto que la moda no están sencilla como aparenta, hay mucho trabajo detrás”, destacó Aranza.
Ella se ha dado cuenta que la moda y la mercadotecnia van de la mano y es muy importante que estén siempre en sintonía.
El negocio familia de Aranza y Lucero es de fabricación y venta de valerina para dama de moda, por lo que el módulo de Tendencias e Innovación de Producto, con Saúl López, fue de gran ayuda para ella, al conocer como se generan las tendencias.
Otras herramientas que Aranza adquirió fue el buen uso y manejo de las redes sociales, por ejemplo los horarios y el tiempo de red que deben usar, dependiendo al público meta al que se quiera llegar.
Ana Julia Pamplona Gutiérrez
La diseñadora Julia Pamplona encontró en el Tec un programa educativo de mercadotecnia y moda, que desde hace un tiempo buscaba.
Desde hace 9 años creó su marca homónima de bolsos para dama con la que emprendió un camino de casi una década.
“En la carrera llevé mercadotecnia y por eso sabía que era fundamental para mi negocio de moda, por eso decidí tomar el diplomado para aprender correctamente c´pmo vender mi producto”, dijo.
Durante 6 meses estuvo en contacto con los expertos del diplomado, quienes le dieron herramientas para que su negocio fuera tomando más forma y con más profesionalismo.
Julia cambió la imagen de presentación de su producto, desde lo superficial hasta la raíz, también conoció más de storytelling, que es la capacidad de contar historias a través de un producto.
“Lo que quiero es que mis productos no los compren sólo por su apariencia, sino que cada uno de ellos les cuente una historia diferente y se identifiquen con ellos”, enfatizó.
Para la diseñadora gráfica el módulo de historia de la moda la ayudó a reforzar sus conocimientos sobre el tema; mientras que las clases de tendencias e innovación de producto con Saúl López sirvieron para que supiera exactamente de dónde vienen las tendencias y por qué.
La empresaria siempre quiso aprender sobre escaparates, por lo que la ponencia de Emilio Ortega y su tema Visual Merchandising fue de gran utilidad para que conociera sobre las bases.
Julia recomienda a loe emprendedores acercarse a las instituciones que les apoyan como el Gobierno del Estado.
Ella sugiere que sigan preparándose siempre y tomen en cuenta las diferentes incubadoras de negocios que existen en la ciudad.
“Es necesario que hagan su planeación formalmente con misión, visión, valores y metas. Embárrate de contabilidad, de finanzas, no lo harás tú todo pero de verdad sirve tener por lo menos nociones”, finalizó Julia.
