Las obras de restauración de la Parroquia de San Sebastián mártir, también conocida como El Sagrario avanzan a pasos agigantados, por lo que el inmueble religioso recobrará su esplendor este año.
Carlos Alberto Cortés Galván, director de Obra Pública Municipal, informó que ya concluyó la primera etapa de la rehabilitación del templo y que esperan terminar la segunda etapa para mayo.
En global han invertido más de 1.4 millones de pesos.
Dijo que el Sagrario es uno de los templo más emblemáticos de la ciudad, el cual se localiza en el corazón de León, en plena Zona Peatonal.
“Actualmente la torre de la Parroquia presenta condiciones de alto deterioro, las cuales serán intervenidas en esta segunda etapa de restauración. Con esta acción mejorará la imagen urbana del Centro Histórico”, señaló el funcionario.
Ahora la torre de cantera del Sagrario, el primer templo construido en León a finales del siglo XVI y que fue Catedral provisional de 1864 a 1866, luce limpia.
“Qué bueno que la estén arreglando porque la verdad sí se miraba muy descuidada; ahora la torre está más brillosa y sin hierbas ni popó de paloma”, dijo Ana Lira.
En 2016 se informó que el mantenimiento de las fachadas de la Parroquia del Sagrario y del templo de la Tercera Orden, que se localiza en la Plaza Fundadores, sería incluido en el programa Revive León.
La Parroquia de San Sebastián, santo patrono de la ciudad, es considerada patrimonio arquitectónico e histórico leonés y respeta la traza original de la fundación de la entonces Villa de Nuestra Señora, ahora ciudad de León.
“Es una muestra del legado de nuestros antepasados y por ello símbolo de la identidad leonesa”, señala uno de los anuncios que está en la obra.
Fieles católicos recuerdan con indignación cómo en junio de 2008 delincuentes convencieron al párroco José González Cardoso (qepd) de restaurar las campanas que estaban en la torre que ahora es remodelada.
El sacerdote lo aprobó y por la madrugada llegaron con una grúa y bajaron las dos históricas campanas.
La Diócesis interpuso una denuncia ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
En 2009 el párroco Carlos Muñoz Hernández, ahora rector de la Catederal, declaró que según las investigaciones se supo que ambas campanas estaban en un taller ubicado en la calle Tierra Colorada No. 2, de un pueblo llamado Cacalomacan, cerca de Toluca, Estado de México.
Pero las campanas nunca fueron recuperadas.
Ese mismo año se robaron una campana de 600 kilos del templo de San Juan Bosco.
Cambia edificio al paso de los siglos
La Parroquia del Sagrario ha sido modificada en diversas ocasiones desde su construcción, teniendo al final del siglo XIX y principios del XX, las últimas intervenciones, las cuales pueden apreciarse actualmente.
En lo que fueron grandes huertos del entonces Convento de San Francisco, donde ahora es la tienda Coppel, se construyó la Casa Municipal.
A mediados del Siglo XX fue demolido el convento, o Monasterio Franciscano, que colindaba con la Parroquia del Sagrario.
En el Archivo Histórico Municipal de León (AHML) informaron que originalmente el templo fue de una sola nave, pero que le añadieron el crucero para darle una planta de cruz latina.
La portada lateral norte de la Parroquia, es decir, la que da hacia la Plaza Fundadores, así como su torre, datan del siglo XVIII.
“Ambos elementos pueden considerarse característicos del estilo barroco tablerado”, según se explicó en el Archivo Histórico.
De acuerdo con documentos históricos, a finales del siglo XVI llegaron los frailes franciscanos a León y construyeron el monasterio.
En 1613 por orden del Virrey de Guadalcázar, Diego Fernández de Córdoba, se ordenó un presupuesto de seis mil pesos en la obra de la Parroquia.
La construcción de la obra inició en 1635. En 1636 la Iglesia fue dedicada a San Francisco de Asís, ya que en la Villa de León se encontraba la orden monástica de los franciscanos.
También ha sido dedicada a San Diego y finalmente a San Sebastián, santo patrono de los leoneses.
La historia relata que los franciscanos ocuparon el convento y el templo hasta 1767, año en el que los frailes jesuitas y franciscanos dejaron la Villa de León.
Después, en 1777, la Parroquia pasó a ser administrada por la Diócesis de León.
En 1864, con el nombramiento del primer obispo de la ciudad, monseñor José María de Jesús Díez de Sollano y Dávalos, la Parroquia del Sagrario fue Catedral de la sede episcopal.
De 1864 a 1866 estuvo en la Parroquia la imagen de la Madre Santísima de la Luz, mientras se construía la actual Catedral Basílica.
