A la parroquia del Espíritu Santo ingresó Vanessa Hernández Murillo, quien se mostró agradecida con Dios por la fortuna de llegar a sus quince años de vida.
En esta importante fecha, la quinceañera estuvo acompañada por sus papás, los señores Alejandro Murillo Gutiérrez y Sandra Rodríguez Márquez, quienes elevaron una oración al Creador por permitirles estar presentes en cada uno de los momentos más importantes de su heredera.
Como padrinos,Vanessa eligió a José Jesús Rodríguez y Guadalupe Márquez , quienes se comprometieron a velar por la formación espiritual de su ahijada.
Luego de recibir la bendición del párroco, la cumpleañera subió al altar para entregar a la virgen su ramo de flores.
La celebración continuó en un elegante salón de fiestas, lugar que lució decorado acorde a los colores predilectos de la cumpleañera.
Antes de disfrutar del banquete de la noche, Vanessa bailó en compañía de sus chambelanes el esperado vals.
Un cumpleaños para recordar por siempre vivió Vanessa en el inicio de una de las mejores y más esperada etapa de su vida; sus quince años.