El olor que distingue a un billarista en torneo es el de tabaco.
La sala del Club Diamante no dejó de funcionar y el cigarro fue el motor perfecto para no permitir descansar el recinto durante 24 horas seguidas. Mismas que sirvieron para terminar la primera ronda de clasificación por grupos.
La intensidad del Abierto Nacional de Carambola será así hasta que termine, el motivo, la basta respuesta de competidores que rompió record y logró reunir a 360 competidores de toda la República, excepto por Campeche, Durango, Baja California Sur y Yucatán.
Jugadores del Estado de México fueron los que mayor primeros lugares tuvieron hasta el corte, cuando cerca de 20 grupos ya habían terminado la fase y aún faltaban otros 70 de cuatro jugadores cada uno.
Entre los mejores del estado estuvieron Erick Macías, Jorge Hernández, Israel Grajeda y José Flores quienes lograron el primer puesto de su grupo y esperan la segunda ronda a jugarse el sábado.
Algunos de los asistentes proponen que el torneo es uno de los mejores del país, incluso de América ya que los “maestros” que mayor experiencia tienen en eventos grandes, lo ven con mucho potencial a crecer.
Por otra parte, hay quienes hacen honor a la ciudad durante el torneo y aprovechan su ratos libres para ir a la feria, comer y distraerse antes de entrar a la sala, prender un cigarro y jugar.