De entre los personajes que dejaron huella en su tierra, y fuera de ella, destaca Catarino Tafoya Meza, ex jugador de Reboceros de La Piedad de la vieja guardia quien ha colgado los tachones, pero dejó historias para compartir como legado.
Los personajes que el balompié ha dado en esta tierra son muchos, pero pocos han logrado llegar a nivel selección como Catarino Tafoya, Carlos y Ramón Morales, Cosme Castro o Álvaro Ortiz.
Sobrinos de Tafoya recuerdan a su tío como un ídolo del futbol local, a quien lo motivaban sus deseos de destacar en categorías superiores y que lo llevaron a nuevos horizontes.
Este empuje fue la razón por la que duró sólo dos campañas en Reboceros de La Piedad, pues su nivel futbolístico le daba para pensar en grande y no dudó en emigrar a otras tierras.
A sus 19 años ya atraía las miradas por sus dotes en la cancha. Su talento lo llevó primero al Club Ciudad Madero de Tamaulipas de Segunda División, donde se coronó campeón de goleo individual.
Sus inicios en el futbol
En el Club La Concepción, del mismísmismo barrio de La Purísima (Conchos), fue donde Catarino dio sus primeras muestras de calidad y habilidad para golpear el pesado balón de cuero.
Siempre fiel a los colores de Conchos, Tafoya llegó a adolescente con deseos de pertenecer a una categoría superior; entonces probó suerte con los Reboceros.
A finales de los años cincuenta, con 17 años de edad y mucho ímpetu hizo su debut con la escuadra piedadense. A partir de su integración al club auriazul, comenzó a escalar peldaños hasta ser considerado uno de los máximos anotadores de Segunda División.
Sin embargo, en su segunda campaña con los michoacanos, Catarino Tafoya enfrentó a Ciudad Madero, el equipo tamaulipeco invicto del año de 1959 que sólo perdió ante el conjunto Rebocero; el verdugo del invencible Madero fue precisamente ‘Cata’ que les propinó dos golazos.
Esa tarde mágica fue el pase de entrada a Ciudad Madero, que lo invitó a jugar el siguiente torneo en sus filas.
Los tamaulipecos anhelaban los servicios de Tafoya y fue así como Catarino al norte del país a principios de los años 60.
Jugando para Ciudad Madero le tocó hacer historia: coronarse como el único campeón invicto, sin derrota alguna en el torneo. Ganó el Ascenso a Primera División coronándose como monarca goleador del campeonato en Segunda División.
La vida le sonreía a este ex jugador. Fue llamado para que se integrara a una Selección de Segunda División donde compartió filas con grandes ídolos del balompié mexicano de la década de los sesenta.
Su calidad lo llevó a la Selección Mayor de México para que ‘El Tri’ encarara las eliminatorias para el Mundial de Chile 1962. Sin embargo, a pocos días de partir al país andino, ‘Cata’ quedó fuera por una por una infección estomacal que lo marginó de los entrenamientos.
En esa convocatoria, el piedadense estuvo entrenando a la par de Jesús del Muro, Salvador Farfán, Guillermo ‘El campeón’ Hernández, Ignacio ‘El Gallo Jauregui, y la leyenda Antonio ‘La Tota’ Carbajal, por mencionar algunos.
El buen paso que tenía lo llevó al otro lado del país, a la perla tapatía: el Atlas de Guadalajara requería de su talento donde jugó un tiempo, luego pasó por el Oro de Jalisco otra temporada para luego volver a Tampico para integrarse a los Orinegros de Ciudad Madero; allí terminó su carrera como futbolista cuando tenía 28 años.
Etapa como entrenador
Catarino Tafoya se cambió los pantalones cortos por los largos y se estrenó como entrenador de Tamaulipas dirigiendo a los equipos grandes del estado: el Correcaminos en Segunda División y el Tampico del máximo circuito.
Aunque en La Piedad también le ofrecieron dirigir a los Reboceros de Segunda División, “Cata” antepuso su vida de familia que ya había establecido en Tampico durante tantos años.
Uno de los ex compañeros con los que contó en Reboceros es el recién fallecido Enrique Aguilar, quien siguió sus pasos primero siendo jugador y luego entrenador.
Anecdotas de ‘cata’
En un tremendo clásico de Jalisco entre Atlas y Chivas, que ganaron los rojinegros 2 goles a 0, las anotaciones cayeron por pie de Catarino Tafoya que era un certero ariete al ataque.
La infección gástrica que le costó no ir al Mundial, se debió a que en la etapa de preparación a los jugadores les dieron permiso de salir de la concentración, momento en que Catarino y otros jugadores como Salvador Reyes se fueron a comer unas carnitas.
Ya en la concentración, Tafoya Meza se sintió mal del estómago y no pudo hacer el viaje a Chile.
Esquela
El goleador piedadense, Catarino Tafoya, murió el 3 de noviembre del 2012 en Ciudad Madero donde pese a no ser su tierra de origen la adopto porque allá triunfo de manera mayúscula en el balompié mexicano y procreó una familia.
