Piezas clásicas, contemporáneas, de géneros como el jazz e incluso de música mexicana, interpretó la artista taiwanesa Luo Chao-Yun con la pipa, un instrumento musical chino de cuatro cuerdas con más de 2 mil años de antigüedad, en el marco del Festival Internacional Cervantino.
En su presentación en la Exhacienda de San Gabriel de Barrera y rodeada de su público entre el cual destacó la presencia del embajador de Taiwán en México, Carlos Liao, interpretó piezas clásicas de su país natal como ‘La luna en lo alto’, y ‘La emboscada’, ésta última narra a través del sonido una batalla entre reyes, por lo que en algunos momentos suena el instrumento como si fueran espadas.
La intérprete comentó que el instrumento de cuatro cuerdas, antiguamente se tocaba como una guitarra y que como las cuerdas son muy duras, utiliza uñas de plástico porque las suyas son muy frágiles. Agregó que el instrumento tiene más trastes que las antiguas porque toca más música contemporánea.“Algunas piezas antiguas son demasiado contemporáneas, porque sólo una parte son sonidos”.
Después tocó ‘Seis gatos y luz a la vida’, que el compositor escribió para la gente de México; su nombre se debe a que él tiene seis gatos y en la pieza representan diferentes sentimientos. Siguió con ‘Galope en Shangri-La’, jazz libre con un poco de improvisación.
La artista que estudió su maestría en el Conservatorio Central de Música de Pekín cerró con dos canciones mexicanas: ‘La llorona’ y ‘Bésame mucho’. Antes de su interpretación invitó a la audiencia a cantar y varios de ellos se animaron a hacerlo.
Entre aplausos del público y felicitaciones por parte del embajador de Taiwan, presentó una última pieza titulada ‘Sublime gracia’, para bendecir a todo México.