Víctor Manuel Estrada, uno de los profesores que en los últimos años se ha ganado cariño y respeto por sus alumnos, en su mayoría mujeres, hoy nos deja entrar un poco más allá de su pasión por esta disciplina que mueve su vida, al ritmo de la mejor música que puede existir: La amistad.

.Víctor, ¿cuánto tiempo tienes dando
clases de Zumba?.
.¡Uy…ya tengo 7 años y como coreógrafo cumpliré 13 primaveras.

.Y de verdad, ¿porqué te gusta ser instructor?
.Bueno, amo ser instructor porque es mi trabajo y no lo cambiaré por nada. Es mi pasión, mi vida, es mi manera de expresar el amor que siento por las personas, por el cuidado de la salud por llevar bienestar a las personas y verlas felices.

.Entre los deportistas famosos, aveces hay una fórmula especial, Víctor ¿A quién te encomiendas antes de iniciar una clase?
.Mi mayor inspiración es Dios, él me da la oportunidad de vivir día con día y además de tener tantas bendiciones como lo son mis alumnas y la gente que sigue mis clases.

.¿Te costó trabajo llegar a donde estás ahora?
.Me costó mucho trabajo, pero el amar por tu trabajo te abre puertas y siempre he creído que el ser humilde abre caminos; lo más importante es hacer tu trabajo sin importar el que dirán.
Sí se ponen trabas en el camino, pero luchó por seguir adelante y a dar el siguiente paso. Agradezco mucho a tantas personas que me han apoyado a lo largo de mi camino.
.Además de amigos, ¿Qué más te ha dado el zumba?
.Principalmente me ha dado la bendición de estar rodeado de mis alumnas que tanto quiero y amo y me han apoyado a lo largo de tantos años. También me ha dado muchos colegas que me respaldan sin ego y sin envidia, son personas humildes y maravillosas; son claramente amigos leales y sinceros que me dan su apoyo incondicional.
Pero el ser instructor de zumba ha llevado a varias partes mi talento, mi carisma y el gusto por el baile.

.¿Alguna vez te has rendido?
.Existen momentos donde quiero rendirme pero me forjo al superar lo negativo y digo que todo es posible siempre adelante.

.Cuando eras niño ¿Te veías como instructor o cuál era tu sueño?
.Siempre fue mi sueño. Ser bailarín o maestro de baile y lo logré. Desde los cuatro años me adentré al baile y con perseverancia logré mi sueño.
.¿Qué has sacrificado por ser instructor?
.Convivir con mi familia, mis amigos, eventos sociales pero lograr mis metas requieren sacrificios.

.¿Cuándo iniciaste, llegaste a dar clases gratis para darte a conocer?
.Inicié dando clases en la colonia de mi casa y cobraba una pequeña cuota y poco a poco se fue generando el espacio para dar más clases, de hecho hubo muchos eventos que no cobraba que hacía de corazón para darme a conocer.

.¿A quién le agradecerías tu éxito?
.Primero a Dios por no dejarme solo, a mi madre que es mi ángel de la guarda ya que mi vida, mi corazón, mis pasos son suyos, la amo.
   A mi familia los amo con toda el alma, a la señora hermosa por tanto cariño y apoyo. Además agracezdo a mis grandes amigos quienes han dejado marcada mi vida.
   También a todos mis colegas por ser ejemplo a seguir y principalmente a mis alumna; sin ustedes no sería nada. Desde luego agradezco a mi hermana mayor, Alejandra, que es mi inspiración de valores y fortaleza.

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