Después de estar durante años en el primer lugar de inseguridad en todo el Estado, ahora Celaya se ubica en el tercer o cuarto lugar.
Así lo dijo el director de Policía, José Antonio Martínez Rodríguez, quien dijo que hasta hace un año Celaya estaba en el primer lugar, pero de ahí a la fecha y con la colaboración de corporaciones policiales de todos los órdenes de gobierno, el trabajo que han hecho los policías municipales y las actividades preventivas, se ha mejorado en cuestión de inseguridad.
“Celaya duró mucho tiempo con el primer lugar, yo creo que tenemos más de un año que estamos entre tercero y cuarto lugar, se debe principalmente al equipo de trabajo que se ha hecho entre gobierno y ciudadanos. He tenido mucho apoyo por parte de la ciudadanía”, señaló.
El jefe policiaco destacó que a veces el tema de la inseguridad es cuestión de percepción.
“Cuando yo llegué, el primer problema que tuve fue la percepción de la ciudadanía, cuando llegué la percepción de la ciudadanía era totalmente negativa, inclusive no participaba, para cambiar la perspectiva de la gente sí falta bastante y esto no es trabajo de uno o dos años, porque no es exclusivo del Municipio, es a nivel nacional, pero respecto al Municipio de un 0% que había de cercanía con la ciudadanía, me atrevo a decir que estoy en un 70% de apoyo en varios programas por parte de la ciudadanía”, señaló.
Martínez Rodríguez destacó que el reto que queda y dejará para la siguiente administración, es seguir trabajando en disminuir el robo en todas sus modalidades.
“Ahorita mi compromiso es estar al 100%, continuar hasta el término de la administración con el trabajo, y no bajar los brazos en los delitos que más suceden, como es el robo a vehículo, casa habitación, a transeúnte y comercio, seguir con la misma fuerza para seguir este tipo de eventos”, indicó.
Le gustaría repetir en el cargo
José Antonio Martínez Rodríguez, director de Policía, señaló que sí le gustaría repetir en el cargo, pues le quedaron “muchos pendientes” en la presente administración.
El funcionario aseguró que haría un buen papel, pues ya conoce la problemática y sería una continuidad en los trabajos.
Aunque reconoció que hasta el momento no lo ha mandado llamar el alcalde electo, Ramón Lemus Muñoz Ledo.
“Hasta el momento no ha habido ningún acercamiento, ahorita mi compromiso es con esta administración, si me invitan claro que con gusto aceptaría, pero hasta ahorita no ha habido acercamiento. Siento que todavía hay mucho que dar, aparte existe muy buena coordinación con los tres niveles de gobierno, cosa que en su momento estaba fallando, y siento que si se continúa con el plan de trabajo, puede haber muy buenos resultados”, indicó.
Comerciantes temen por extorsiones
Aunado a los decomisos de mercancía que reciben de manera constante, los comerciantes del Tianguis de los Lunes y de otras plazas, también hacen frente a las extorsiones que cada día son más “intensas”; incluso muchos prefieren salir a vender a otros municipios que quedarse en Celaya.
Hay quienes de plano ya se mudaron a otros estados y otros que se esconden en otros municipios, pues en Celaya les exigieron un pago para dejarlos trabajar y se negaron.
Los vendedores revelaron que ahora es hasta más viable vender en las comunidades rurales.
María Morales tenía más de 15 años vendiendo ropa americana usada en el Tianguis de los Lunes, pero de buenas a primeras le comenzaron a subir el costo “de la plaza” que piden los grupos delictivos, lo que hacía que tuviera menos ganancias.
“Comenzaron a pedirnos hace unos cinco años 50 pesos y luego fue subiendo, pero a últimas fechas dependía de cuánto veían que vendía, a veces venían hasta dos o tres veces al día a pedirme, quién sabe cómo le hacían para calcular lo que llevaba vendido, fueron subiéndole a la tarifa y al final parecía que estaba trabajando para ellos.
“Pero aparte de todo ya lo hacen de manera descarada, lo cobran a la vista de todos y no hay otra, o pagas o pagas, tengo miedo a que un día aparezcan muertos mis hijos”, mencionó.
Hay comerciantes que afirman que algunos de ellos se han tenido que aliar con los grupos delictivos no tanto por gusto, sino por amenazas.
“Qué te queda, si te encargan que tú cobres la cuota qué te queda, si ya saben todo de ti, dónde vives, quién es tu familia, y te amanezan, así hay varios que sabemos que andan trabajando con ellos, pero qué les queda y nosotros no nos podemos meter, sabemos que está pesado y mejor pagamos lo que nos toca”, dijo Josué, comerciante del Tianguis de los Lunes.
También los comerciantes de los Tianguis de los Domingos, coinciden en que no les queda otra más que pagar la extorsión, pues de lo contrario pierden la oportunidad de vender o hasta su vida puede estar en peligro.
También los empresarios se quejan de las extorsiones y de las amenazas que reciben de los grupos de la delincuencia organizada y delincuencia común.
Ha habido negocios que han tenido que cerrar o cambiaron de giro, por ejemplo los dueños de centros nocturnos y algún centro de esparcimiento o discoteca.
