Ambientalistas señalan que la Química Central de México (QCM) es un foco rojo de contaminación en la zona y que no se debe permitir que reinicie operaciones.
“La Química Central de México es un peligro latente para la salud de miles de personas y para el medio ambiente. Las autoridades solo tienen un estimado de que hay 340 mil toneladas de desechos tóxicos contaminantes de cromo a cielo abierto, pero no han dicho que en el subsuelo, confinados, hay no menos de 100 mil toneladas”, dijo Carlos Chacón Calderón, dirigente estatal del PVEM.
Él ha sido uno de los ambientalistas que siempre han denunciado los graves daños a la salud que ha generado la Química en la zona y en la salud de las personas.
“Ha generado una gran contaminación al ambiente. Esto está comprobado, pero sin duda alguna que la postura del Tribunal para dar reapertura tiene qué ver con procesos actuales de esta industria y apegado a las leyes, pero sin tener en cuenta el daño que ha generado y que se ha recrudecido”, aseveró.
El Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Decimosexto Circuito, que ordenó a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) retirar la clausura, no ha tenido en cuenta el pasivo ambiental que hay y que se multiplicará.
“Se actuó en base a un criterio más apegado a la ley, pero no se juzgó desde lo que constituyó la querella, que fue la gran contaminación y el daño que ha generado. Esta planta es un foco rojo en el país, no solo en Guanajuato”, dijo.
“La contaminación que ha generado es alarmante y una gran amenaza para los habitantes de los pueblos del Rincón, por lo que la Profepa y Semarnat deben insistir en mantener clausurada esta empresa”, subrayó Chacón Calderón.
Por su parte el dirigente ambientalista de Clase Ciudadana, Fernando Araiza Martínez, también se pronunció en contra del fallo del Tribunal Colegiado, destacando que es evidente el gran daño ecológico que ha generado por más de cuatro décadas en la zona del Rincón.
Apuntó que muchas de las fincas y viviendas las han tenido que vender por la gran contaminación que se registra, tanto en el subsuelo, arroyos y ríos.
Destacó que los ambientalistas deberán hacer un frente común y reiniciar la lucha contra esta planta productora de químicos que ha generado severos daños a la salud de la colectividad.
(José T. Méndez Valadez)
