Maximiliano, es el nombre que llevará por siempre el hijo de la pareja formada por Melissa Prieto Ortiz y Jorge Garduño.
Los señores Garduño Prieto pidieron frente al altar de la Parroquia del Espíritu Santo el sacramento del bautizo para su heredero, donde amigos y familiares fueron testigos de este gran acontecimiento.
La pareja se mostró atenta a cada una de las palabras que el sacerdote les compartió, quien los invitó a no dejar que su hijo aleje del camino y la fe de Cristo.
Para esta ocasión, Samanta Prieto de Levinson y Luis Javier Levinson Garduño, fueron los padrinos del pequeño Max, quienes se comprometieron a ser buenos guías en las enseñanzas de su ahijado y ser ejemplos de vida para el pequeño.
Al terminar la misa, los invitados y los papás del niño, se reunieron en el salón de fiestas Mesón del Campanario, donde prepararon una gran fiesta en honor a su primogénito.
Los padrinos obsequiaron lindos presentes como recuerdo de esta maravillosa fecha que jamás olvidarán.
