León no ha cambiado pese a su regreso a Primera División, pero Marco Bueno sí, y para bien. El tiempo ha hecho lo suyo con el sinaloense, lo hizo madurar y le ayudó con minutos y goles.
El delantero ya no es aquel jovencito de 17 años. Ha crecido no sólo en edad, sino también en experiencia, cosas que le permitirán hacerse de un lugar en la plantilla esmeralda y responderle a una afición que conoce y sabe, no le dará ningún respiro.
“Vengo preparado y traigo más recorrido, no vengo como la primera vez. Ya sumé varios minutos, tengo más goles, más experiencia, creo que llego más maduro”, aseguró previo a la práctica en la encharcada cancha de Casa Club por la lluvia.
Y es que, reconoció, no llega a cualquier equipo, sino a uno que pese a los años que permaneció en Liga de Ascenso no perdió su grandeza.
“Desde la primera vez que llegué a León sabía que venía a un equipo grande, con mucha historia. Ahora que regreso mi perspectiva es la misma, León es uno de los mejores equipos de México y debe estar peleando siempre en los primeros lugares”.
Se mojancon fuerza
Los Esmeraldas tuvieron ayer una jornada singular, pues debieron empaoarse en el entrenamiento y además practicaron unos minutos en pleno charco, algo que tomaron con alegría.